jueves, 27 de marzo de 2014

{AsI ErA, y AsI Es}







Mi clienta tenía un sillón estilo Luis XV,  que quería darle una imagen nueva y ubicarlo en un lugar diferente. Se puso en contacto conmigo, y no resultó difícil su transformación, ya que el estilo del sillón, y el buen estado de conservación, me permitían hacerle modificaciones para conseguir el objetivo que se pretendía.






El lugar donde había que ubicarlo es en una habitación de un ático en un pueblecito del Pirineo.  El techo y una de las paredes,  forradas en madera, las otras,  una de ellas, en tono crudo y la última en tono gris. El cabecero de cama esta tapizado en terciopelo gris.





Tras un decapado del mismo, le pinte en tono gris perla, y a todos los relieves junto con la rejilla del respaldo le aplique pintura en tono plata, que posteriormente fui reduciendo para conseguir un aspecto más envejecido. Para el pequeño detalle del tapizado de los brazos, igualmente elegimos una tela estampada en tonos grises y plateados. El asiento del  sillón se tapizo con una piel de cordero en tono claro, dándole  ésta bastante volumen. El contraste de tonos nos propicio bastante  luminosidad en la esquina donde iba a ser ubicado.







Para que no se sintiera solo, le acompañamos de un baúl, en negro y madera, al que, en algunas zonas del mismo,  lo tapizamos con papel plateado, para conseguir el punto de unión con el sillón.  Y así mismo y en un tono de plata envejecida le pinte un pie de lámpara con una tulipa en color gris, y todo ello,  se colocó sobre una alfombra  estilo persa en tonos granates y tejas. En la pared de detrás del baúl y por encima de este, coloqué un cuadro  de ventanas de la localidad, con marco en blanco para darle más color al espacio y un corazón en pizarra negra para recordarnos donde nos encontramos.















viernes, 21 de marzo de 2014

{DecorandO, 15 MetroS De CostA DeL MediterraneO}






El sol brillaba con todas sus fuerzas, su color amarillo era intenso, y  me inspiro,  para darle al banco de madera blanca y ligeramente envejecido, unos tonos que nos recordará su presencia diaria.













Esta pequeña muestra, está formada por unos  elementos de decoración sencillos,  que bien  podemos incorporar,  a una casa en la ciudad o bien en la playa, aunque ahora mismo,  este decorando un trocito de  nuestras costas, y los relacionemos más como muebles para un ambiente de playa que para el de ciudad.

Una mesita velador con un velón  encima de la misma, ambos en color blanco, nos quería simular la torre de control de ese nuestro velero, que pronto surcaría por nuestro Mar.



Banco, en madera de color blanco roto, con terminación en envejecido, con colchoneta en lona cruda en la base y unida a la misma por unas correas en cuero natural. En los brazos, cojines realizados al tamaño de su ancho, en la misma tapicería y con el detalle de las correas de cuero. Para romper con la monotonía del color se le aplico unos pequeños detalles en color amarillo.









Durante estos días que hemos estado preparando esta muestra,  la brisa  venía a nosostros, a acariciar nuestra piel, y de forma continua, soplaba un suave viento que nos llevaba a pensar que aquel velero sería capaz de navegar por las aguas de este mar azul.




El cuadro, es una obra de un gran amigo  mio, que mientras yo realizaba el pintado de los muebles. El, inspirado en los veleros que cruzaban delante nuestro, una y otra vez,  a lo largo de la jornada,  realizó esta impresionante acuarela, en tonos azules el casco del barco  y difuminados tonos en sus velas por ese constante ir y venir del viento que lo bambolea entre las olas. El marco, ha sido recuperado de un viejo cuadro y tras una pequeña transformación conseguimos adecuarlo a la nueva obra.






Espero que os haya gustado y cualquier cosa en la que estéis interesado podéis contactar conmigo.








lunes, 3 de marzo de 2014

{ CoN LuisuvE TambiéN ViajandO En ChesteR}



Los sofás Chester se han reconocido por sus grandes superficies y su tapizado en cuero, han sido y en muchos casos,  todavía de grandes dimensiones, cómodos y lujosos; en sus orígenes obtuvo mucho éxito durante la época victoriana y fue uno de los primeros en incluir un relleno integral y reposabrazos a la misma altura que el respaldo.



Este modelo de sofás nace en el siglo XVII en Reino Unido, donde se desarrolló una amplia gama de modelos parcial o totalmente acolchados. En la actualidad, lo podemos encontrar en el mercado, ya que se reconoce como un clásico, en dimensiones menores que los originales, para dar la oportunidad de colocarlos en salones de espacios mas reducidos. Fue un sofá que se diseño originariamente con tres plazas, sin embargo el tiempo lo ha ido adaptando a los ambientes y ya se obtienen en dos plazas y en sillón individual. Los diseñadores también han conseguido darle este toque de estilo Chester a  las conocidas chaise longe.





Igualmente los diseñadores han incluido en el modelo chester,  los pufs, que en muchos casos pueden hacer de mesa de centro, y no haciendo conjunto con el sofa o los sillones sino para elegir un contraste de estilos.

El tapizado, que suele ser de cuero,  pero actualmente se realizan en múltiples acabados como, terciopelo,    damasco,  lino, o de cualquier otro tejido, usando la paleta  completa de colores en función de las tendencias de esa temporada. No olvidándonos que el rey sigue siendo el de cuero en color marrón.